Es una nota amaderada con olor herbal y floral. Te traslada a la libertad que brinda el campo y la naturaleza. Esta relaja tu mente cambiando tu ánimo, aportando energía y buen humor.
Majestuoso y eterno, el encino pertenece al género Quercus, símbolo de fortaleza y nobleza. Su madera, rica en matices olfativos, es sometida a procesos de destilación en seco y maceración prolongada, liberando notas ahumadas, terrosas y leñosas. En perfumería, su esencia se entrelaza con composiciones orientales, amaderadas y fougère, aportando profundidad y carácter.
Historia
Desde tiempos inmemoriales, el encino ha sido un emblema de resistencia. Su madera robusta dio forma a embarcaciones, muebles de linaje y barricas donde reposan vinos y licores, impregnándolos de un aroma inconfundible. En el arte de la perfumería, evoca la serenidad de los bosques antiguos, otorgando a cada fragancia un sello sofisticado y atemporal.
Origen
Francia, España, Estados Unidos, México, Alemania.
Sabías que...
El encino es el guardián del tiempo en la fabricación de barricas, dotando al whisky y al vino de notas dulces y especiadas que perfeccionan su carácter. En perfumería, se fusiona con musgo de roble, vetiver y vainilla, dando vida a aromas cálidos, envolventes e irresistiblemente elegantes.